domingo, 15 de mayo de 2011

Resiliencia Universitaria

Por Cesar Oviol

"Yo no puedo callar cuando el corazón me da gritos"
Dostoyevski

En varias ocasiones he dedicado mis reflexiones al tema universitario, debate que creo es necesario y urgente darlo si queremos construir una nueva sociedad. Las universidades hoy responden a un modelo de país que no existe, de ahí la insistencia en transformarlas.


Con la entrada en vigencia de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV), el pueblo refrendo el camino para la refundacion de todas las instituciones del Estado, incluyendo las universidades, pero quienes dirigen nuestras casas de estudios se han creído mas poderosos que el pueblo constituyente.


Las universidades, son centros de saberes, generadores de conocimiento, ideas y soluciones, por eso son instituciones que están en constante revisión y cambio, pero nuestras casa de estudios fueron convertidas en centros de negocios y privilegios, por unas mafias y castas que en nombre de la autonomía y la educación del pueblo han dilapidado millones de dólares. Nuestras universidades las han convertido en dadoras de títulos, generadoras de profesionales sin compromiso social, sin ningún tipo de actualización académica o muy escasa, cuantos de los que pasamos por las aulas universitarias recordamos a profesores con los mismos apuntes de hace 20 años atrás.


Ciertamente existe una crisis universitaria, el modelo se agotó, pero esta crisis no es presupuestaria como nos quieren hacer ver, va mucho mas alla, es una crisis moral, de quienes la dirigen y por tanto están inhabilitados para continuar al frente de la casa que vence las sombras.
Los universitarios y el pueblo hemos estado sometidos por décadas al secuestro, al chantaje, el autoritarismo y al terror que se instauró en nuestras casas de estudios y que impidió que la educación universitaria formara a los técnicos y científicos para el desarrollo nacional. Si alguna dictadura hay que derrocar hoy en Venezuela: es la que gobierna nuestras universidades. Los rectores y rectoras copiaron modelos foráneos de dependencia y dominación condenando a las mayorías a la pobreza.


La nueva universidad por construir debe cumplir con la misión que le asignó el pueblo en la construcción de la nueva sociedad y no es otro que el expresado en el artículo 109 de la CRBV. De ahí que quienes hemos resistido en contra del viejo modelo moribundo, no podemos perder la esperanza, en el horizonte brilla la luz que nos señala el camino hacia la universidad nueva, democrática, participativa, innovadora, creativa, alegre, científica, humanista, transdiciplinaria, productiva, reflexiva, critica, en síntesis la nueva universidad no puede ser sino Revolucionaria.
Según E. Chávez y E. Yturralde (2006), "La resiliencia es la capacidad que posee un individuo frente a las adversidades, para mantenerse en pie de lucha, con dosis de perseverancia, tenacidad, actitud positiva y acciones, que permiten avanzar en contra de la corriente y superarlas". Esta capacidad la hemos desarrollado los universitarios de bien, que somos la mayoría, somos la reserva moral, esperanzados de que nuestras universidades formen al nuevo hombre superior al actual en bondad y sabiduría.


Quienes desde la izquierda impiden, por acción u omisión (ya sea porque desde la burocracia no promueven la organización de los sectores progresistas hacia el tránsito del nuevo sendero o por que desde dentro de las universidades legitiman con su participación electorera) que ese viejo modelo sea enterrado definitivamente por el pueblo en revolución quedaran condenados por la historia. El nuevo Estado de Derecho y de Justicia requiere de la Universidad relaciones de interdependencia y corresponsabilidad, así como también, coordinación en la orientación y conducción, junto al pueblo, hacia la consecución de la Liberación Nacional y la Democracia Socialista.

Twitter: @cesaroviol
E-mail: cesaroviol@gmail.com

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